martes, 16 de octubre de 2012

El rebelde absoluto p. 1, por Carlos Aravena.



          ¿ Cuál sería el pensamiento y la acción de un rebelde absoluto e inmortal? ¿ Posee esa forma de actuar y pensar el Satanás de los evangelios canónicos?
           Para responder estas preguntas se necesita aclarar que rebelde absoluto es el decidido a sacrificarlo todo, incluso su existencia, para no depender de nada ni de nadie.
           Por cierto quien así piensa sentirá adoración por su voluntad y dolor por todo lo que él es o no es por causas ajenas a ella.
           Para ser un rebelde absoluto basta poseer la actitud descrita. Los actos y violencias propios de un rebelde no son la rebeldía misma, sino efectos de ella, y pueden no aparecer si el rebelde carece de toda posibilidad de realizarlos.
          Ni el amor a otra persona, ni el deseo de conocer a otro, ni el aceptar ser criatura cabe un rebelde absoluto. No sentirá ese amor porque para ello se necesita hacer propio el dolor y el goce de otro; pues ese es el signo del verdadero amor, y eso es depender, ya que es otro, el amado, el que determina el propio dolor y goce.
      No poseerá ese deseo de conocer porque nadie se basta así mismo para conocer a otro, ya que necesita de la existencia de ese otro, y eso es depender, pues es dependiente todo acto para cuya ejecusión su autor necesita de otro ser.
       No aceptará ser criatura porque en nada determina el ser creado el acto que lo crea. Por ello este acto es siempre imposición para la criatura resultante.
        A nadie, opino, se le ha preguntado antes de existir, ¿ quieres ser o no?¿ prefieres ser águila , paloma,nube,cordero o una roca junto al mar?
       Por el contrario, cada uno al saber de sí se encuentra con un ser no elegido ni pedido que es el propio. Por eso, la persona creada que acepta ser lo que es, ejecuta un acto de sumisión, pues acepta lo que otro hizo de él. Por cierto, a un enemigo de todo sentimiento le parecerá aborrecible la imposición de un ser, y la sola carencia de alguna posibilidad la estimará un odioso límite impuesto a su querer. Para él sólo valdrá la pena ser Dios, único ser al cual nadie le impone nada y que posee todas las posibilidades.
      Sin duda el anhelo de un ser en rebeldía absoluta no es realizable. El rebelde lúcido, si alguno hay, conocedor de esta imposibilidad, intentará autoeliminarse pues en la nada de nada se depende.
       Pero si ese rebelde se sabe inmortal vivvirá desesperado al sentir la privación de la posibilidad de no ser.
       Esta última aciaga condición aquejaría a satanás, primera criatura rebelde, principe y maestro de los seguidores de igual vía por ser el primero en transitarla. El sería un rebelde lúcido, indestructible e irrevocable, pues la simplicidad de su naturaleza angélica le daría un ser no aniquilable y una voluntad no reversible ni divisible, ya que él no puede ser en parte rebelde y en parte no, o cambiar de una actitud a otra.
     ¿ Cómo juzgaría a Dios y a la creación un ser así, si existiera?
     Por cierto pensaría en forma coherente, pues lo contrario pertenece a quienes no entienden sus propios conceptos, y ni el más desdichado de los ángeles alcanza esas tinieblas derivadas de la torpeza natural.
    Pero la lógica no dará luz a Satanás, pues su pensamiento debe obedecer a su rebeldía como todas sus acciones. El ha sacrificado todo por su rebelión, y también sacrificará la verdad por ella. Así su pensamiento tenderá principalmente a justificar su decisión rebelde, pues ella dominina sus acciones y por lo tanto justificarla equivale a justificarse. Por eso, él no deseará saber y no sabrá, a menos de ser forzado, de los hechos contrarios a esa justificación, y creerá poseer una verdad propia, la verdad rebelde sólo accesible a los seres, a juicio de él, auténticos.
      O sea, Satanás, l elegir la rebeldía, ha elegido las tinieblas, pues su rebelión no le permitirá entender el amor, ni interesarse en el ser de los demás. En cambio le hará ver como maldición toda dependencia, y como maldita toda criatura, por ser irremediable desde el comienzo  su depender. Por el contrario, su rebeldía le hará parecer deseable la condición divina por ser independiente y lo levará a confundir la perfección con el poder; ya que se debe poseer un poder ilimitado para que la voluntad propia no tenga límites, que es lo deseable para un ser que rechaza toda limitación venida de causas ajenas a su querer.
     Así el pensamiento satánico tenderá a elaborar una especie de teoría de la rebelión total. La exposición de esta muy subjetiva doctrina(pues el que se rebela contra todo también lo hace contra la realidad), conviene, creo, en labios del mismo Satanás, ya que para comprenderla se precisa ver el mundo desde los ojos de ese pretendido maestro, y la ficción propuesta puede ayudar a ese fin.
     Imaginemos que Satanás se adelanta en el gran escenario de la creación y comienza a hablar. Estas, creo, serían sus palabras:
     " Es necesario ser Dios o nada; porque  sólo él es perfecto y sólo lo perfecto merece existir".
       " Al principio sólo era Dios y todo estaba bien; pero Él creó seres imperfectos, limitados en su poder, sometidos a la ley, y así entró el mal en el mundo, pues todo límite al poder es un mal, y toda presencia de ser limitado un dolor".
     " Por eso afirmo que todas las criaturas son cosas malas, son mezclas despreciables de ser y nada, de luz y sombre, y además de malas, dolientes, cuando saben de sí mismas, porque entonces conocen sus límites, ven su vacío, sienten su impotencia y saben irremediablemente su dolor. ¿ Pues quién puede darles la radiante naturaleza del ser originario? Ni él mismo puede hacerlo".
     " Yo sé que el Al tísimo es perfecto en luz, goce y poder, pero es cruel: ¿ Acaso no da vida a condenados al dolor? Y mayor es su crueldad si más sabio es el espíritu que crea, pues ese comprende mejor su distancia  con el verdadero ser."
   " Así resulta que Yo, Satanás, la más sabia de la creaturas, soy la más sufiente, la que mejor conoce el dolor de no ser Dios. Por eso he venido a ser la principal víctima de la crueldad divina, y llevo la carga de dolor más pesada que hay en el Universo":
     "  Pero al precio de mi padecer he descubierto la verdad. Y llegado a saber que todo es malo, las criaturas desde su origen, el creador por haberlas hecho."
  " ¿ Acaso de un extremo a otro la tierra no es un campo de dolor, un testimonio del mal?.
     " Yo he visto madres devorando a sus hijos palpitantes en ciudades que agonizan por el hambre, a inocentes llevados al patíbulo, a calumniadores sepultando se verguenza en las profundidades de las aguas".
     " He contemplado la soledad total, la humillación completa, y la frustración de todos, porque toda vida es promeza que no se cumple".
      " He visto las carnes despedazadas del leproso, la baba del hidrófobo, he sentido el hedor de la peste":
    " ¿ Acaso Dios no sabe lo que ocurre? ¿ No lo puede remediar el Omnipotente? ¿ Son culpables todos los que sufren? ¿ O van arrastrados al mal por su mismo dolor?¿ Qué puede sentir un auténtico frente al universo, sino el absurdo, la desesperación, la naúsea? Sí, eso es lo que debe sentir. Y esa es la única bendición; pues si todo está maldito sòlo hay una bendición, y es saberse maldito":
    " Pero existen otros espíritus, los inauténticos, que en vez de mirar el vacío de su ser, la miseria de la creación, contemplan gozosos la gloria del creador, se alegran de una felicidad ajena, gozan con una perfección que no poseen. Se niegan a ver la crueldad del Todopoderoso y contemplan sólo su perfecto poder y gloria. Ellos, aceptan ser criaturas, consienten en ser una sombra que envuelve una gran nada. ¿ Cómo comprender esta conducta?. Sólo la inautenticidad de estos satisfechos la explica. Han mentido tanto que han olvidado su mentira. Han llegado a creer los cantos gozosos que entonan sus labios sin verdad".
    "  Pero a los espíritus auténticos no se les oculta la realidad. Saben que es mala, y la sufren, pero no pasivamente, sino que la destruyen en la medida de su poder. Si todo lo real es malo, ¿ Hay acto más justo que destruir?"
    " Por desgracia no todo se puede aniquilar. Yo mismo, Satanás, soy inmortal, y no volveré a la nada, aunque haya destruído en mí todo lo que puede destruir".
     " Yo me mutilo , me muelo, me desgarro, y me quemo sin cesar. He llegado a ser hijo de mi furor, y no del tirano que me creó, por eso me asemejo a una cosa mosntruosa, soy como la humeante ruina de una ruina. Y está bien así. Porque en esa forma manifiesto que no acepto ni aceptaré lo que El quiso que yo fuera; y en la medida que puedo destruyo su obra".
     " El necio con espanto dirá al verme" esta cosa horible fué la más hermosa de las criaturas", pero yo sé que la belleza es encubrimiento y mentira; ¿ Por qué ha  de causar placer una despreciable mezcla de ser y nada? Para mí sólo el abismo es bello, porque el vacío se parece a la nada, y en ella no hay dolor".
     " Sí, el infierno existe, pero yo no lo he creado. El infierno es la creación misma, sin mentiras, sin ilusiones".
      " Sí, yo soy el tentador, yo muestro la magnificencia del fruto prohibido. El hombre al comerlo se habrá hecho para el mal. ¿ No es acaso más sabroso que el bien? Así saldrá del engañoso paraíso, verá la realidad y odiará al Dios cruel que lo quiere sumiso a normas que no puede cumplir".
    " Sí, yo soy el príncipe del reino del furor. En mis dominios todos destruyen a todos, porque todos somos justos y lo más justo es destruir. Por eso sólo espíritus lo habitamos, porque en nosotros la destrucción jamás termina".
     "Sí, mi reino es el reino del fuego, ¿hay algo que destruya mejor que él".
      "Pero yo a nadie atormento, sòlo revelo al que viene a mí que está maldito, por sólo llegar a ser, para que, como yo, maldiga a quien lo creó".
      " A todos los sinceros, a todos los que saborean la amarga verdad del ser, yo abro las puertas de mi reino".
     " Venid a mi los suicidas, vosotros habéis quebrado bajo la carga de la existencia. Vosotros sabéis lo que es ser una criatura".
      "Venid a mí los hechiceros. Vosotros anheláis el poder de los dioses y os repugna la impotencia de los hombres. En vuestras ceremonias me complazco".
       "Venid a mí los que buscáis lo imposible, sabréis que la felicidad es imposible. Venid a mí, los que queréis a cualquier precio una sociedad perfecta, un hombre perfecto, una mujer perfecta. Vosotros destruiréis todo, porque todo es imperfecto".
        Hasta aquí las palabras que atribuyo a Satanás. En él no creo que serían insinceras.
                                                                              Continuará....

5 comentarios:

  1. de terror.........pero que real

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  2. Estimado Anónimo:
    Aún falta más en el relato. Espere el próximo post.

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  3. quede mas clara mmmmm igual maquiabelico

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  4. interesante , me podrias decir cuales son las premisas con las realidades amargas? y como se podrian relacionar con los tiempos actuales? bastante bueno.

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    1. El tiempo actual es el de la rebeldía del hombre, liderada, por los hijos de las tinieblas.

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