viernes, 15 de agosto de 2014

MUJERES OBISPOS ANGLICANAS : CONSECUENCIAS

 

MUJERES OBISPOS ANGLICANAS : CONSECUENCIAS

  
Atila  Sinke Guimarães 
 El 14 de julio de 2014, en la reunión del sínodo anglicano en la Universidad de York se aprobó  la consagración de mujeres al episcopado. Justin Welby, el jefe de la rama inglesa de la secta, ya había respaldado esta decidión desde que se hubiera comprometido a conducirse “episcopalmente” y a gobernar  “sinodalmente”.
 
Mujeres anglicanas sacerdotes victorean la aprobación de las mujeres obispas por su sínodo
Después de la  Apostolicae curae de León XIII en 1896, que declaraba las órdenes de los anglicanos nulas y sin efecto, sabemos que para nosotros, los católicos, no existe ninguna diferencia si el señor Welby decidiese nombrar obispo a su chófer, a su criada, o a su gato. El chofer y la criada seguirían siendo sólo respetables ciudadanos británicos tal como lo eran antes, y el gato,seguiría  siendo un cazador potencial de ratones. No hay Poder de Orden  en ellos.
Sin embargo, dado que vivimos un tiempo en que la iglesia conciliar fomenta el ecumenismo y el diálogo inter-confesional de todo tipo con las sectas, esta acción de los anglicanos se vuelve importante como precedente para la Iglesia Conciliar, que, como sabemos, está coqueteando con la posibilidad de hacer sacerdotes a las mujeres. 
 Como nota al margen, permítanme recordar a mis lectores que en Estados Unidos los episcopalianos son una rama del mal árbol Anglicano. Adoptaron un nuevo nombre, en el siglo 18, para evitar que EE.UU pareciera dependiente religiosamente de Inglaterra después de que alcanzara la independencia política. Los estadounidenses no querían la primacía Inglesa en nada; por tanto, la llamada Iglesia Anglicana o la Iglesia de Inglaterra en los EE.UU. fue re-nombrada como Iglesia Episcopal. Pero estas ramas continúan reuniéndose y decidiendo juntas las cosas. Los
pasos de la aprobación de los sacerdotes y obispos de la mujer entre los anglicanos siguieron estos pasos : (1) 
  • 1915 – El predicador Maude Royden escribió: “No hay nada en el sacerdocio para que los concilios de la iglesia justifiquen la exclusión de las mujeres.”
  • 1916 – Un concilio de arzobispos propuso que los obispos considerasen “las mejores formas de utilizar los servicios y recibir el mensaje de mujeres que hablan en la iglesia o en otro lugar.”
  • 1920 y 1930 – La Conferencia de Lambeth propuso en el orden del día, la ordenación de mujeres, pero el tema fue rechazado.
  • 1944 – El obispo Ronald Salón de Hong Kong ordenó a Florencia Li Tim-Oi. La ceremonia tuvo lugar en la isla neutral de Macao. Después de la guerra, sin embargo, se vio obligada a volver a ser una diaconisa.
 
Justin Welby fue siempre un defensor de mujeres obispos. Por encima , rodeado de mujeres anglicanas sacerdotes
 
  • 1971 – El Consejo Consultivo Anglicano, dirigido por el arzobispo de Canterbury Michael Ramsey, aconsejó a los obispos para que con la aprobación de su provincia pudieran ordenar mujeres en el sacerdocio. 
  • 1974 – Once mujeres episcopales en los EE.UU. fueron “irregularmente” ordenadas por tres obispos. 
  • 1975 – El Sínodo General votó que no hay “ninguna objeción fundamental a la ordenación de mujeres en el sacerdocio.” 
  • 1976 – La “Iglesia” Episcopal en los EE.UU. fue la primera en votar formalmente la ordenación de mujeres y las anteriores ordenaciones irregulares fueron aceptadas. 
  • 1978 – “En Inglaterra, en el Sínodo se presentó un proyecto para “llevar adelante la legislación para eliminar las barreras a la ordenación sacerdotal  de mujeres y para su consagración en el episcopado”. La  propuesta fracasó. 
  • 1979 – Este fracaso dio origen al Movimiento para la ordenación de mujeres. 
  • 2012 – Una propuesta en el sínodo de consagrar mujeres en el episcopado fue derrotado por un pequeño margen de votos en la cámara de los laicos; la cámara de los obispos y la del clero, lo aprobaron. 
  • 2014 – La misma propuesta fue aprobada por la Cámara de los laicos bajo la influencia de Justin Welby; las otras dos camaras continuaron con su anterior aprobación. En consecuencia, la medida para permitir que las mujeres pudieran ser nombradas obispos fue aprobada or el Sínodo anglicano.
Hasta la fecha 37 mujeres han sido consagradas obispos en el grupo anglicano, y 28 de ellas aún están activas. 
El enfoque del Vaticano sobre el tema 
¿Cuál es la perspectiva del Vaticano sobre esta nueva decisión de los anglicanos para nombrar mujeres sacerdotes y obispos? En principio, la postura doctrinal de la Iglesia Católica es inmutable. Juan Pablo II declaró que la Iglesia no tiene autoridad para conferir el sacerdocio a las mujeres. Incluso el cardenal Walter Kasper, más tarde , en su calidad de Presidente del Consejo Pontificio para la Unidad de los Cristianos, pronunció una conferencia en 2008 ante los obispos anglicanos reunidos en la Conferencia de Lambeth. Él les dijo que no aprobaran mujeres obispos, porque esto podría arruinar las relaciones ecuménicas entre la Iglesia Conciliar y la secta anglicana y podría posponer indefinidamente el reconocimiento de la Iglesia de las ordenaciones anglicanas.
Sin embargo, desde hace algún tiempo se ha observado una esquizofrenia en los últimos Papas, respecto de la doctrina y la práctica, en el sentido de que la doctrina sigue siendo la misma, sin embargo hay cambios en la práctica. Hemos visto esto en primer lugar  respecto de los anticonceptivos en la vida matrimonial. La doctrina prohíbe los métodos artificiales de control de la natalidad; en la práctica, sin embargo, la inmensa mayoría de los confesores asesora a  los fieles en el uso de tales métodos “siguiendo su conciencia.”
El divorcio es otro caso en el que se encuentra esta esquizofrenia: La doctrina sigue siendo la misma que la que siempre hubo a favor de la indisolubilidad del matrimonio;  en la práctica, sin embargo, cualquier persona puede obtener una anulación por medio de una variedad de pretextos falsos proporcionados por el nuevo Código de Derecho Canónico .
Francis pidió la bendición de Welby: Una aprobación implícita de la posición de esta última sobre la mujer
También tenemos el caso de la homosexualidad, donde la doctrina aún combate la homosexualidad como un vicio contra la naturaleza; en la práctica, sin embargo, vemos que la apertura “pastoral” para la aceptación de los homosexuales en el clero, en la iglesia, y en todas partes – incluso en el Vaticano -. la hace verdaderamente letra muerta.
La  misma práctica esquizofrénica se ha aplicado con respecto a las ordenaciones anglicanas. Se la condena  en la doctrina: “No puede haber mujeres sacerdotes u obispos, en ninguna circunstancia.” En la práctica: la total aceptación. Lo hemos visto en la aceptación de facto  en innumerables iniciativas ecuménicas. Por citar sólo tres, hemos visto cómo Benedicto XVI saludaba a una mujer sacerdote ejerciendo en la abadía de Westminster, en su visita a Inglaterra; cuando fue invitada una mujer (Metodista) obispo a un sínodo de Obispos Católicos, en el Vaticano; en la admisión de la obispo anglicana Linda Nichols y varias mujeres sacerdotes como miembros normales de ARCIC, comité ecuménico patrocinado por el Vaticano para fomentar las relaciones entre católicos y anglicanos. 
El Papa Francisco sin duda era consciente del fuerte apoyo que estaba dando al arzobispo Justin Welby para la ordenación de mujeres obispos cuando le recibió el pasado 14 de junio, y pidió la bendición al arzobispo anglicano.  ¿No contituyó este gesto simbólico una aprobación del Papa a lo que Welby tenía la intención de hacer – y de hecho hizo poco tiempo después?¿No fue este gesto un reconocimiento práctico de las órdenes anglicanas inválidas? Este panorama sugiere que en la práctica no sólo nos estamos dirigiendo hacia una situación similar a la de los anglicanos respecto de  mujeres sacerdotes y obispos,  sino que también nos acercamos al día en que la doctrina de León XIII con respecto a la invalidez de las ordenaciones anglicanas se revocarán definitivamente  o llegarán a lo menos, en la práctica, a una muerte oficial.
1.      Los datos están tomados de Ruth Gledhill, “Cuando se rompió el techo de cristal” y de Christopher Lamb & Ruth Gledhill, “El voto para las Mujeres crea obstáculos a la unidad de la iglesia,” The Tablet , 19 de julio de 2014, pp 4-5, p. 24.

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