Primeras horas del día
"Tienes razón, no hay nada más triste
que ver llorar a un poeta,
pero no hay nada más lindo,
que un sollozo de amor golpeando tu puerta;
trato y no puedo,
no hay esperanzas para mi,
ojalá que algún día
las encuentre en ti.
Dame el coraje para vivir,
regálame la fuerza para luchar
y quizás tengas el valor para amar,
pero nunca me des el motivo para morir
No sé si estoy aquí o allá,
no sé donde voy,
tal vez algún día sepa quien soy,
mas, por el momento
sólo sé que te busco a ti, mi amor"
Meditaciones por un pasado
"Todo lo que pude ver
no lo logré tocar,
creí llegar a una etapa
y sólo comencé a creer
en lo que salvé al partir.
Debo dejar todo
y comenzar a salvar,
el tiempo que debe devolver
las ansias que suele disolver,
las fallas que no me dejan avanzar.
Los momentos comienzan a faltar
y sólo mi pensaiento
logra rescatar,
nuestra alma que se empieza
a revolver.
Mis penas las escribo hoy,
las escribo al momento de vivir
y en el instante en que me veo morir".
La última vez que el poeta concurrió para que le leyeran el tarot, la "pitonisa" le dijo la siguiente sentencia: Poeta, las cartas me dicen que en el transcurso de esta semana morirás. El poeta guardó silencio ante tal sentencia, pero su espíritu quedó totalmente perturbado. Así fue, pasaron los días, y en el transcurso de esa semana, el poeta muere malipulando un arma en circunstancias muy extrañas. El destino le había jugado una mala pasada al poeta. Esa sería la conclusión de sus colegas.
Nosotros sabemos que no fue el destino, si no más bien la sugestión de un alma anclada en la fatalidad de la vida. Si su vida era un tormento, su muerte debía ser igual. El fatalismo tormentoso de un alma incrédula termina lamentablemente en una tragedia.
El tarot, es un instrumento para llamar a las criaturas demoníacas para que marquen el sello eterno de aquellos que los invocan. El conocimiento del futuro sólo le compete a Dios, el conoce los tiempos. Las criaturas angelicales, sólo pueden tener un cierto conocimiento por intuición sin ningún grado de certeza de lo que va a ocurrir en la vida de los hombres. En la película de Mel Gibson la Pasión, el demonio interroga a Cristo preguntándole quién es. Intuía quién era, pero no lo sabía a menos que Dios se lo revele.
La ciencias ocultas juegan a develar los misterios de la naturaleza por la intercesión de criaturas superiores, pero esas criaturas superiores son ángeles caídos que lo único que quieren es que el hombre se pierda en la desesperanza de la vida futura. Jugar a ser dioses es meterse entre la patas de los caballos, tarde o temprano seremos pateados.
Sin duda, la sensibilidad de los poetas es muy especial, su emotividad los desborda. Pascal decía que el corazón tiene razones que la razón no puede alcanzar. Pues bien, estás razones si no son subordinadas al juicio de la razón terminan siempre en hechos de infortunio.
" Apágate llama fugaz,
la vida solo es una sombra errante,
un burdo actor
que apenas un momento
se pavonea y agita
sobre el escenario
y nunca vuelve a ser oído
Es un cuento contado por un idiota,
lleno de ruido y de furia
y que no significa nada"
William Shakespeare, Macbeth, act. 5, esc.5
Por lo menos, Shakespeare era creyente, su fe lo fortalecía en los momentos de debilidad. Cuando flaqueba la voluntad, aparecía la gracia del cielo. El pobre poeta, en cambio, lo gobernaba la desesperanza, no tenía el consuelo de la fe, ni la esperanza de ésta. ¿Cuántos hombres de este siglo tecnológico son como el poeta? Sin Dios, sin ley.
Vivimos en un mundo donde la gente está más sola que nunca, la vida familiar y de amistades va en decadencia. Ya no hay hermanos, ya no hay amigos verdaderos en quien confiar, estamos solos frente al mundo. En nuestra soledad nace la melancolía, y en nuestra melanconía surge la desesperación.
Vuelca tus ojos al cielo, y allí encontrarás la paz. Nadie puede vivir verdaderamente, si no lo hace en paz. Nadie tiene el derecho a hacértela perder. Cuida tu paz, cuídala como un gran tesoro, mira que la tempestad no vuelca a aquellas casas construídas sobre tierra firme. La tierra firme es la fe, entonces, guarda tu fe.
Poeta de la fatalidad, si hubieras tenido tan sólo la esperanza que hay alguien allá arriba que te ama, tu vida y tus talentos no se hubieran perdido. Te fuiste tan joven, tu lápiz y papel aún te añoran.
REQUIESCANT IN PACE POETA.
Fraile amigo:
ResponderEliminarA todo lo que usted bien ha señalado, y desde una perspectiva más mundana, dejaría caer una lágrima más porque, sobre la base de los textos que me ha transmitido, me parece que era un buen poeta.
Un abrazo.
G.Chester.
Es cierto Chester. Los versos trasuntan delicada pero elocuentemente el sufrimiento interior del que habla nuestro amigo el fraile.
ResponderEliminarSaludos a todos.
Garra de Jaguar
Estimado Amigo:
ResponderEliminarPiense que con tan solo dieciocho años el poeta escribía esto. Realmente era un diamante en bruto, pero consumido por la angustia y la desesperación. Sin duda, este tipo de personalidad obedece a un patrón de conducta que se repite en las distintas épocas de la historia humana.
Pero lo que siempre me pregunto es: ¿Por qué la mayoría de los poetas presentan estados melancólicos?, para mi esto es un misterio. Hay algo que pareciera desbordarlos, y no sé qué es ese algo.
Un abrazo.